Venus en Acuario. Esquina Plutón. Hasta acá
Le toca a Venus ingresar en Acuario y darse su beso con Plutón. El amor y la muerte inician su danza, y ponen nuestro mundo patas arriba. Nada como recordar el paso finito por esta tierra, para preguntarse adónde van nuestras ganas, nuestros placeres, nuestros disfrutes, nuestra forma de utilizar recursos propios.
¿Qué me produce placer, seguridad, autoestima? ¿Me estoy queriendo a mí misma? ¿Me veo y me gusta lo que veo? Cómo encuentro riqueza en la que soy, en la que soy de verdad, no para complacer. Venus convoca a la femineidad. Nosotras y nuestros cuerpos. Lo que le exigimos. Lo que no nos gusta. Lo homogéneas que queremos ser. Las idealizaciones que alimentamos que nos llevan por derroteros ingratos.
Amar las que somos, enteras. Con lo que hay. Sin desear ser otras. Eso es trabajar la energía femenina.
Venus en Acuario es intuitiva. Si algo sentís que no va en tu relación, es que no va. Si no te sentís tenida en cuenta, si te quedás donde estás por dependencias afectivas o económicas, esta Venus plutoniana dice “Hala, a hacer lo que hay que hacer, aquí no es.”
Esta Venus quiere reciprocidad. Tiene la valentía de preguntarse cuánto da, y si recibe lo que quiere. El arrojo de confesarse que cuando da lo hace esperando que se lo reconozcan, y que hagan por ella. Por eso Venus se decepciona. Porque creía que daba sin querer retorno, pero al tocar fondo con su Plutón, dice: “Hasta acá”. El amor sano no es dar sin esperar nada a cambio. Es dar poniéndonos un límite. Para no enojarnos con nosotras mismas. Para no depender de los otros. El otro no me hace…yo me dejo hacer.
Venus plutoniana independiente y autónoma, hacia allí nos va a llevar. La independencia y la autonomía son muy poéticas, pero cuestan. Cuesta llegar a tenerlas. Y cuesta sostener depender de una misma y ser autónoma. Sin salvadores. Ni salvadas.
Atreverme a ser adulta es asumir que el buen amor no genera dependencia. Que el buen amor no se aprovecha de otro. Ni por el interés ni por el capital.
Venus valientemente plutoniana, sabremos amar, libres, independientes, y concienzudamente.
Simone Seija
La Psi que leo Registros Akásicos