¿Trabajar para vivir o vivir para trabajar?
- “¿ Y a vos que te gusta hacer? ¿De qué disfrutás?
- De trabajar.
Unos años después de haberme volcado a ser una Lectora de Registros Akásicos, comencé a hacer terapia. Mi psicólogo me preguntó qué me gustaba hacer, qué disfrutaba, y mi respuesta fue sincera. Trabajar.
Porque había llevado tiempo lograr que leer Registros se volviera una fuente de ingresos. Estaba tan en modo agradecimiento de poder vivir de hacer algo que me gustara, que perdí de vista que el trabajo, aunque a una le guste hacerlo, no deja de ser…trabajo.
La definición de trabajo es esa tarea que realizamos por una contraprestación económica que nos permite vivir. En el trabajo, se trabaja.
Y tener una vida por fuera del trabajo, es síntoma de vida saludable.
Tener una vida por fuera del rol de madre, de pareja, de hijo, también es saludable. Porque la vida propia, los tiempos propios, se consiguen dándonos el permiso de tenerla.
Cuando el único disfrute es trabajar, maternar, cuidar de otros, hay que hacerse la pregunta. ¿Qué hay en mi vida que no sea obligatorio? ¿Qué no se vincule a la supervivencia?
Porque hasta los trabajos más flexibles, esos en que podemos viajar y trabajar a distancia, son trabajos.
He viajado en modo “trabajo” y es súper desgastante. Porque al trabajo se le suma no estar en un lugar conocido, las condiciones diferentes, las diferencias horarias, el cansancio de los desplazamientos. Y el cuerpo que pide que viajar es viajar y trabajar es trabajar. Que tengamos piedad de nosotras mismas y demos un tiempo a cada cosa.
A partir de esa pregunta comencé a introducir factores de disfrute a mi vida.
E intento hacerlo en cada etapa con sus desafíos diferentes.
Porque trabajo para vivir, no vivo para trabajar.
A vos ¿ qué te gusta hacer?
Merecemos
Escrito por Simone Seija
La Psi que leo Registros Akásicos
Consteladora Akásica