POLIAMOR…¿LA NOVEDAD CUAL SERÍA?
Leo que es la relación simultánea de tres o más personas. Sabiendo todos ellos que no hay exclusividad afectiva. O sea…más de dos en un vínculo sabiendo todos cuales son las reglas del juego.
Vendría a ser lo opuesto a la infidelidad, porque el requisito indispensable para que alguien sea infiel…es que el otro no lo sepa. Por lo menos, que alguno no esté al tanto.
Lo que más me asombró es el escándalo que se armó cuando alguien público dijo estar en una relación de ese tipo.
Porque al lado de las infidelidades conocidas por todos los integrantes, toleradas, disimuladas, escondidas y que hacen sufrir a todos los involucrados, lo único de nuevo que le encuentro al episodio es…la palabra y que se diga de frente.
Es que de puertas para adentro cada pareja un mundo. Y luego los terceros. Que se acomodan por donde pueden en los resquicios de la pareja.
Porque si hablamos de poliamor en serio, vamos los cuatro al cine, a cenar, vivamos bajo el mismo techo, no sepamos ni de quien son los hijos, compartamos cuentas, tengamos proyectos, planeemos viajes. Digo cuatro por decir, que podrían ser más en tan amplia palabra.
Si no me suena a lo de siempre. Que en mi familia y en casi todas las que conozco he visto la variante clásica del poliamor. Cada uno tiene a alguien sin que el otro lo sepa. O sabiéndolo pero haciendo de cuenta de que no. Y las excusas de que ya no somos felices en un vínculo por eso estamos dejando y el dejar nunca llega.
O las confusiones con el tema de la exclusividad cuando comenzamos un vínculo. Que si no aclaras y lo das por sentado, luego te enteras que oscurecía por el otro lado de la cama.
Vamos…que si sale alguno lastimado, si hay alguno que no entendió bien las reglas, si hay pareja por un lado y gente de fuera por otro, esto es el viejo y bien ponderado “cuerno “ de toda la vida, pero en versión cool y con onda.
Hacer lo que se siente porque realmente se desea. Establecer vínculos en el formato que nos resulte conveniente es un derecho inherente a todos los individuos. Pero…a veces creemos que vamos a poder con algo y terminamos con el corazón lesionado. O siendo el apoyo externo de una pareja que sin nosotros no perduraría .
O nos imponen un modelo que al otro le va pero a nosotras no, y no nos da la fuerza para poner el límite.
Luego, amor, es una palabra demasiado grande cuando se pronuncia entre dos y tres me vienen sobrando. Si me das a elegir entre el polirubro o la dedicación exclusiva, me quedo con lo segundo. Y cuando ya no funciona…Abur…
Como en la moda, queda poco por descubrir. Vuelven los mismos modelos que utilicé en los ochenta con nuevos nombres para maquillarlos.
Pero detrás del poliamor están las mismas lágrimas, las mismas decepciones, las mismas hipocresías y las mismas tonterías que como humanos repetimos desde el inicio de los tiempos. Que si amas a alguien de veras…ni te fijas en otro. De toda la vida…
Bendiciones infinitas! Nunca estamos solas!
(CONTINUARÁ…)
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos