Hoy, sólo por hoy…
Hoy, sólo por hoy, no pretendas solucionarle la vida a nadie.
Hoy , sólo por hoy, focaliza tu atención en tu propia existencia.
Hoy, sólo por hoy, no te quejes…de nada. Ni del ómnibus que no pasó, ni de haber llegado tarde, o temprano, ni del frío, ni del calor, ni de la costumbre de tu mujer de apoyarte los pies helados en la cama, ni de que siempre se olvidan de ponerle la tapa a la pasta de dientes.
Hoy, sólo por hoy, llega a tu trabajo por otro camino, y proponte sonreírle a cada persona que se te cruce.
Hoy, sólo por hoy, abrázate al Árbol de la Vida, y siente que puedes todo lo que quieres.
Déjate llenar de un aire liviano y sutil que se llama alegría.
Permítele que se adueñe de ti y te acompañe toda la jornada.
Ríete con ganas aunque sea una vez.
Escucha tu canción preferida y cántala aunque desafines.
Pon toda tu energía en tomar contacto con tu cuerpo, con cada uno de tus órganos y agradéceles por funcionar, por estar, por que te permiten vivir.
Y recuerda que las personas Alegres no se complican La Vida;
no gastan energías en complicársela a nadie mas y sobre todo…no se fijan en lo que hacen los otros sino que se concentran en hacer el bien ellos mismos.
A ser así se aprende, se enseña y se inspira.
Bendiciones y alegría hoy y todos los días de tu vida!
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos