Hoy recibí un mail…
Hoy recibí un mail de una mujer valiente. De alas desplegadas y mente clara.
Valiente como pocas… porque cuando le pedí autorización para compartir algunas de sus palabras me dijo que era un orgullo.
Porque es de las que sabe que lo que nos pasa a una nos pasa o puede pasar a todas, y que ayudarnos es destrabar el silencio. Llevar Luz a los lugares más oscuros.
Me dijo que de la Lectura de Registros en el tema pareja no había salido 100% convencida. Que en su interior sabia pero su mente quería que fuese todo un invento.
Que con eso había levantado una muralla y logrado todo este tiempo seguir adelante. Tratando de convencerse a sí misma.
Me habló de su propio trabajo personal. Del camino que le quedaba por recorrer y de que se daba cuenta que los Registros lograron hacerle ver aquello a lo que estaba negada. Porque había recibido pruebas concretas de situaciones después de irse de aquí.
Desde su sabiduría innata señaló que estamos muy acostumbrados a vivir lo que establece la sociedad, a olvidarnos de nosotros mismo y de lo que nos hace bien.
Que a veces pensamos que vivir en una relación enfermiza donde los dos no están en la misma sintonía es lo mejor, porque lo que más nos cuesta es aprender a soltar… y que ahí aparecen los miedos… y si no puedo… y si me estoy equivocando y lo pierdo para siempre.
Sin prisa pero sin pausa, se dispone a preparar el terreno de su estado de ánimo para con la verdad que había visto a la cara, tomar las riendas de su vida. Porque tiene muy claro lo que quiere.
Le agradecí con toda mi alma las palabras.
Leer Registros no es meramente canalizar. Es ser instrumento para brindar la información que se necesita en un momento de la vida, asumiendo ante todo que somos seres humanos.
Un ser humano que abraza al otro con el corazón cuando siente que los caminos son duros. Que deja claro que todo lo que se dice es porque estamos preparados para recibirlo. Y que tanto el contenido de sus Registros como su grabación son de su única y exclusiva propiedad.
Una mujer valiente me hizo el honor de permitirme compartir su experiencia. Sabiendo que confidencialidad es mantener en reserva nombres y hechos, con una única excepción…cuando el interesado nos autoriza a revelarlos.
Ni nombres ni hechos se revelan aquí, pero sí el proceso del coraje de vencer el miedo y tomar las riendas de la propia vida con las manos.Porque hay maestros y milagros en cada recodo del camino. Y ella es una maestra… gestando su milagro
Porque cada día somos más las que con solidaridad, amor, coraje, cuidado entre nosotras, ética y valentía caminamos juntas por el camino de la vida. GRACIAS GRACIAS GRACIAS…
Bendiciones infinitas! Y toda la fuerza, la Luz y la lealtad con nuestra esencia, hoy y todos los días!
Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos