Blog - Nunca estamos solas

Hacerte una Constelación Akásica significa unir los hechos sucedidos en vidas anteriores con las repeticiones que se dan en la vida actual.

Es profundizar en una situación, en un vínculo, en un aspecto de la vida, asumiendo la responsabilidad del crecimiento del alma propia.

Porque una Constelación Akásica no busca si repetimos a nuestros antepasados. Sino que encuentra lo que sucedió en nuestra vida anterior que se une a la actual. Y al unir todos los pedazos dispersos en el cosmos en una sesión, comenzamos a armar nuestro puzzle interior.

El cuaderno Constelador es necesario después que realizamos una sesión de Constelaciones Akásicas.

Utilizando la grabación que reciben de esa sesión, individual, virtual, y profunda, comienzan a escribir de puño y letra la información que fueron recibiendo.

– La foto energética del vínculo.
– Los pactos de almas en esta encarnación.
– La descripción de cada vida. De el rol que tocó tener. De cómo eran los vínculos. Y de cada uno de los detalles que se unen con la vida actual, y ponen luz en el hoy.

Entre cada capítulo dejan espacio. Porque cuando terminan de escribir, toca sentir. Vivenciar. Y poner al pie de cada vida, lo que se podría haber modificado de haber tenido la información adecuada.

Al hacer este ejercicio, al llegar a la vida actual, se hace sencillo ver dónde es que hay que trabajar algo, o cambiar, o impedir que se repita una situación.

Hoy quería contarles acerca del cuaderno Constelador.
Aunque ya hay muchas de uds que lo están usando.
Rockeando vida, trabajando en nuestro Cuaderno Constelador.

Escrito por Simone Seija
La Psi que leo Registros Akásicos
Consteladora Akásica