Blog - Nunca estamos solas

Dicen que Virginia Woolf…

Dicen que Virginia Woolf sufría de los nervios. Por eso la enviaron a la isla de Godrevy, frente a Skye, para que descansara y se sanara. Pero ella escribió su novela El Faro donde se planteaba la realidad de ser mujer en un tiempo donde podían estudiar, escribir, trabajar, pero se esperaba que fueran amas de casa y madres primero que nada. Creo que le llamaban sufrir de los nervios a vivir la vida a contrapelo, despierta y consciente.

Viajar no es sólo conocer lugares. Sino encontrar el sentido de atravesarlos.

En Edimburgo, existe en la Universidad una Unidad de Parapsicología que estudia e investiga la posible existencia de habilidades psíquicas, la creencia en lo paranormal, la psicología de las experiencias anómalas, el engaño (fraude) pseudo-psíquico y autoengaño, la relevancia social e histórica de la parapsicología.

Dedicarme a los Registros significó vivir algunos de los nervios de la Woolf. Sobre todo porque cuando comencé a leerlos hace 16 años no estaban de moda como hoy. Y la gente te miraba como si anduvieras muy errada por la vida.

No encontrar los lugares que nos comprenden y cobijan nos condena a ser exiliados de nuestra propia existencia.

En Escocia, sentada al lado del río Tay , mientras escribo, pienso en los celtas que pisaron estas tierras. En el lugar que tiene la magia en la vida cotidiana de cualquier escocés. En el respeto que practican por las creencias de los otros, y por la naturaleza toda.

Viajar no es conocer lugares. Es conocerte un poco más a ti misma, y reconciliarte con ser la que eres. Hay viajes internos que cambian la vida sin movernos de lugar. Y esos son los que importan…

Bendiciones! y que todos y cada uno de nosotros llegue a la tierra interna o externa que le pertenezca.

Por acompañarme en este viaje… gracias, gracias, gracias!

Isla de Skye

Simone Seija Paseyro
Lectora de Registros Akásicos